¿Oktoberfest en noviembre? La respuesta es sí. Esta fiesta alemana de fama mundial es capaz de despertar la expectativa de quienes han asistido a ella en ese país europeo o en alguna de sus versiones en otras naciones. Quien fue a Múnich aún recuerda esa algarabía contagiosa y quien no desea algún día ser parte de tal acontecimiento.
Página Siete fue a donde todo se originó: Múnich, Alemania, para dar un vistazo y saber de qué se trata. La relevancia de este "festival de octubre” es tal que gracias a la migración de sus habitantes se ha incorporado en varios países del mundo.
El Oktoberfest tiene un ingrediente irresistible que se presenta en grandes "pintas” y jarras de cerveza de calidad. Por ello, también es conocido como el Festival Nacional de la Cerveza. A ello se suma la música, los espectáculos, la comida y trajes típicos del país europeo.
Su origen se remonta a inicios de 1800, y se lleva a cabo entre septiembre y octubre de todos los años. En Múnich sólo las cervezas que tienen una serie de características se sirven en el festival que anualmente congrega a los amantes de la cerveza y la buena comida al llamado Prado de Teresa, en donde se hace un desfile de trajes tradicionales. Una de esas marcas, que llega a Bolivia, es Paulaner que desde 1818 prepara una cerveza especial para la ocasión de la que sirven un millón de litros, según www.paulaner.es.
Otras de las atracciones en Múnich es una carpa gigante que puede acoger, sin problemas, a 10.000 personas. El festival dura entre 16 y 28 días y según el portal DisfrutaMunich.com congrega a entre 6 y 7 millones de visitantes al año.
Inglaterra, España, Argentina, Venezuela, Perú y Bolivia son algunos países que, en mayor o menor medida, celebran el Oktoberfest. Los que vivieron el festival esperan ser tan afortunados de repetir la experiencia desde este mes. En tanto, una de las marcas ligadas a esta celebración en Alemania mira a Bolivia para llevar a cabo un Oktoberfest de mayor alcance y dimensión.
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